jueves, 20 de enero de 2011

Ovejas y mentiras




La semana pasada, grupos ultra-izquierdistas de Israel y sus homólogos en los Estados Unidos, difundieron la historia de que un pastor árabe “había sido víctima de la violencia de unos colonos judíos que prendieron fuego al campo donde pastaba su ganado, mátandole 12 ovejas preñadas, y luego huyeron en coche”.

La historia de la quema de estas ovejas era tan extremadamente rara que la policía la puso inmediatamente en duda. La quema del campo y de las ovejas se produjo en Shabat, cuando los judíos observantes, no pueden conducir.

El agricultor árabe, Samir Bani Fadel, afirmó que cuatro judíos armados se acercaron a él, lo persiguieron, prendieron fuego al campo, algo que también está prohibido en Shabat, y se alejaron tras propagar el fuego y quemar y matar a doce de sus 12 ovejas preñadas, a la vez que hirieron a otras.

Independientemente de las dudas, organizaciones de derechos humanos israelíes como B’Tselem y Yesh Din, se apresuraron a alegar que el ataque era uno más de los supuestos cientos de actos de vandalismo de los colonos judíos contra los árabes.

En Nueva York, el blog antisionista de Philip Weiss, Mondoweiss, rápidamente reprodujo y difundió el libelo, además de mostrar las imágenes de las ovejas cruelmente quemadas para así despertar la simpatía por los árabes y la ira contra los Judios. “Era un espectáculo horrible”, decía el pastor árabe, “he perdido por lo menos 12.000$”.

Inmediatamente, la Autoridad Palestina pidió a la comunidad internacional que presionara a Israel para detener la “violencia de los colonos”.

La historia comenzó a desmoronarse cuando los árabes señalaron con el dedo a los residentes de Itamar, un blanco fácil, ya que es una comunidad religiosa judía, pero ubicada a casi una hora en coche del lugar del suceso. La historia a continuación fue modificada para esta vez echar la culpa a una comunidad cercana a Maaleh Efraín, la mayoría de cuyos habitantes son profesionales y prácticamente nunca han sido acusados de actividades contra los árabes.

Finalmente, el pastor árabe admitió ante la policía que toda la historia era una mentira y que él fue el responsable del incendio, ya que se puso a quemar unas malezas antes de que se extendiera el fuego más allá de su control. Culpar a los judíos no sólo le habría salvado de la vergüenza de haber quemado y matado a sus propias ovejas, sino que también le permitiría reclamar daños y perjuicios al gobierno.

Yossi Dagan, asesor del Consejo Regional de Samaria, comentó que se trata de un sistema habitual entre los grupos ultra-izquierdistas, quienes hacen campaña con ello en búsqueda de contribuciones financieras de otros países, muchos de los cuales son hostiles a Israel. Ellos luego utilizan el dinero de la Unión Europea, desde donde han llegado muchos miles de euros en los últimos años.

Fuente: Anajnu

No hay comentarios: